El hotel Romoli en Roma es sin duda una excelente opción. La comida es deliciosa y el personal es extremadamente amable. Las habitaciones son espaciosas, con balcón y bonitas vistas, además las camas son muy cómodas. La terraza donde desayunaba era mi lugar favorito por las mañanas. Agradezco mucho contar con un parking privado.

Tienen un parking privado en la propiedad Habitación de buen tamaño y camas cómodas.

La decoración del hotel es encantadora, con mobiliario funcional y suelos de madera que crean una atmósfera acogedora. Las áreas comunes son espaciosas y fáciles de moverse para personas mayores.

Me gustaría que el personal del hotel fuera un poco más atento con las personas mayores y estuviera más dispuesto a brindar información sobre la ciudad.

Aquí la habitación era bastante amplia y estaba en buen estado. El desayuno era increíble 😋. Algunos empleados eran amables y serviciales.

Nuestra habitación era lo suficientemente espaciosa y climatizada y contaba con un balcón, una bonita vista y además una cama maciza. Había una cantidad enorme de comida riquísima, nos ha gustado mogollón todo. Y es que estábamos en un lugar perfecto y excelente relativamente cerca de Verzückung der Heiligen Theresa.

Algunos de los empleados han sido inútiles.

Habitaciones con una cama amplia y un balcón. 🌳

Una habitación tranquila y enorme con balcón, camas cómodas. Personal acogedor con buenos modales. - El restaurante sirve comida local. - Puede describirse como una experiencia relajante.

El hotel es muy cómodo y acogedor, con personal muy amable. La habitación es espaciosa y con camas confortables. El desayuno ofrece una vista maravillosa y deliciosos platos con bacon y huevos. Recomiendo este hotel a todos, ¡no quería irme!

El desayuno en la terraza de la planta superior bueno, con buenas vistas y muy agradable. La habitación y el baño amplios y silenciosos.Buena ubicación, cerca del Metro y paradas de autobús.El personal fue muy atento, llamándonos un taxi por el servicio de mensajería instantánea.El parking permitió que dejáramos el coche hasta nuestra salida de la ciudad.

Me sentí bien acogido, no tengo ninguna razón para quejarme.

Aquí las habitaciones tienen una vista bonita, las camas son muy cómodas y además tienen un balcón para disfrutar. 🌇

Lo mejor del hotel fue el desayuno variado y delicioso, con una amplia selección de opciones. Además, el personal fue amable y servicial, especialmente Mara en recepción. La ubicación también fue excelente, ya que está cerca de paradas de autobús y a poca distancia del centro de la ciudad. La zona en la que se encuentra el hotel es tranquila y hermosa, lo que brinda una sensación de calma. En resumen, este hotel se destaca por la calidad de su desayuno, la amabilidad del personal y su ubicación conveniente en una zona tranquila y cercana al centro de la ciudad.

Tenía muchas ganas de visitar la Basílica di San Giovanni in Laterano y elegí el hotel Romoli solo por eso. Sin embargo, me sorprendieron gratamente las comodidades adicionales del hotel, como los servicios de conserjería y la televisión en la zona común. Me gustó especialmente el desayuno continental tipo buffet, que se sirve en una hermosa terraza panorámica equipada con una pérgola motorizada completamente abierta, con calefacción para el invierno y aire acondicionado para el verano. me encantó el bar relajado donde podía disfrutar de un fuerte café expreso por la mañana junto con el delicioso desayuno continental, o tomar una pastelería por la tarde. Además, el estacionamiento privado supervisado y el bar del hotel significan que no te falta de nada.

La habitación que pedí con 3 camas individuales, y que se mostraba en las fotos al elegirla, resultó ser una habitación con 1 cama matrimonial y un sofá cama que no era nada cómodo, ya que se podían sentir los tubos y resortes. Además, las ventanas eran pequeñas y no pudimos apreciar la vista que se mostraba en las fotos al elegir la habitación.